Es natural al inicio y solo al inicio cuando uno empieza a profundizar sobre diversas enseñanzas que necesita tener mucho cuidado con la vanidad, el orgullo y otros pensamientos negativos que se pueden presentar.
El ego hace que resalte el instinto de superioridad irreal que en ocasiones desarrollamos negativamente los seres humanos y se concentra en el FALSO YO (mente más alma).
Conforme vamos avanzando en nuestras reflexiones, se va interiorizando y materializando en cada una de las relaciones humanas que mantenemos, si somos bondadosos y sinceros de manera inconsciente, pues eso se reflejará por dos principales leyes universales: La Ley de Correspondencia ("Como es arriba es abajo, como es adentro es afuera") y la Ley de Atracción ("Lo que vibras es lo que atraes") desarrollando una nueva "afinidad espiritual" para las siguientes vidas.
Es importante recordar que "cada ser es un maestro y alumno a la vez". El hecho de que en la mayoría de ocasiones no podamos ver la enseñanza no significa que no sea así.
Agradecer es un acto de humildad, perdonar también lo es. En un corazón sincero y sencillo no hay terreno fértil para que crezcan malos deseos o pensamientos oscuros. Podemos en cualquier momento conectarnos con EL TODO para pedir perdón por nuestros actos, sabiduría para entender el camino que he trazado antes de venir a la tierra y volver al camino estrecho, aquel que lleva a la puerta de iguales dimensiones mencionadas por el iluminado Jesús de Nazareth.
Hemos hablado en muchas ocasiones que nos encontramos dentro de la Divinidad, Dios, el universo o cómo deseemos llamar a esa fuerza de amor que nos rodea y nos guía, no me cansaré de mencionarlo hasta que se rompa el paradigma que está "en los cielos" como dice una hermosa oración que también fue modificada para marcar una inmedible distancia, construir un Dios castigador y crear a los falsos intermediarios, completamente alejados de los verdaderos maestros espirituales.
Trabajemos la humildad siempre, disfrutemos de conversar sobre las cosas simples y sencillas con nuestros semejantes, regalemos sonrisas y buenas acciones. Créeme es reconfortante y distraído prestar atención al presente (no olvides que es lo único verdadero) así como también lo es reflexionar en otros aspectos en silencio y soledad.
Todo tiene una razón, alguien nos enseñará a escuchar, alguien nos regalará conocimiento, alguien nos pondrá de regreso al camino cuando seamos soberbios y así reconoceremos al guía espiritual que brilla en cada ser vivo (cualquiera que forme parte de la creación, no solo la humanidad). Debemos hacer algo diariamente para dejar de lado la vanidad y el orgullo. Vestirnos de amor y gratitud no es sencillo, debemos tener paciencia.
Ho'oponopono, Wu-Wei nos enseña a conectarnos con la fuente, a aceptar y fluir, poco a poco se revelará ante nosotros que una de nuestras grandes misiones espirituales en todas nuestras vidas (porque vendrán más) es "ayudar y desarrollar el amor hacia los demás".
La vanidad es hermana de la arrogancia, hija del ego y madre de las apariencias.
Todos somos hermanos e iguales en espíritu así que nuestra VERDADERO YO no es superior a ningún otro.
Deja que cada persona que se relacione contigo sea tu maestro. No existe nadie en esta vida que no tenga algo que enseñarte.