• 30-August-2020

49. Aprende a reconocer las señales que envían desde “Nuestro Hogar”

El loco, en el quinto mes de año, debido a una celebración en todos los pueblos, quiso realizar un regalo de amor, por ello escribió en un pergamino:

“¿Quieres saber si los ángeles o tus familiares que se adelantaron te siguen cuidando?

Con mucho cariño y con el corazón en la mano, te regalo estas siguientes señales, las que también aplican para reconocer la conexión de energía con aquellos seres vivos y con la Divinidad:

Al ver una paloma blanca,

Al caminar y ver plumas blancas en lugares por donde transitas,

Al escuchar la letra de una canción como respuesta a una interrogante,

Al identificar alguna escena del entorno, sintonizándola con alguna situación de tu vida,

Al encontrar sus nombres por donde caminas,

Al sentir cambios en la temperatura del ambiente,

Al ponerse la piel de gallina de repente,

Al sentir una fragancia común y que no eres capaz de identificar dónde la has sentido anteriormente,

Al encontrar en sueños alguna solución a un problema de vida,

Al ver números de ángeles (normalmente son pares similares: 11, 22, 33, 44, etc…),

Al soñar con ellos frecuentemente,

Al percibir su olor,

Al sentir su tacto y presencia…

Mantente alerta para que las puedas recibir y cuando las sientas, disfrútalas. La reencarnación, el alma, el espíritu, la proyección astral, el cordón de plata, la energía en nuestro interior, los seres de luz, etc…; son conceptos que existen desde tiempos ancestrales. Creo en ellos y los envío envueltos en una caja de ternura, independientemente de tu fe. Va acompañada con todo mi afecto”

Finalizó diciendo:

“A todos aquellos a los que su mamita en presencia física no los acompaña, recuerden que se encuentra a su lado hasta que nos volvamos a reunir en nuestro verdadero hogar. Ella los estará cuidando siempre, hasta encontrar el camino a casa nuevamente. Es cuestión de tiempo nada más y nosotros decidimos cómo vivir, si con felicidad o dolor.

Cuando sientan que su ausencia pesa más que una tonelada en los hombros, recuerden que está al frente observándolos, por lo que deben reincorporarse rápidamente y recordar el principio de toda madre: “Jamás nos quieren ver derrotados, infelices o tristes y son capaces de remover el mismísimo universo y hacer cualquier sacrificio por evitar ello”

Un fuerte abrazo de luz”.

Mantente alerta y presente para que puedas reconocer las señales del cielo.